lunes, 31 de octubre de 2016

Celina Feuerstein

 Entre el calor y el brillo



Ella dijo: Me gusta pensar que cuando escribo, amo.
Yo siento en el cuerpo que las letras crecen
y llenan de sonidos
lo que queda de luz
la sombra blanca del día y la negrura
apenas insinuada
de la noche.
A veces llueve y el viento arrastra los poemas
como aves rapaces y alaridos
de brujas volando en sus escobas,
enamoradas
¿ Estarán llorando?
Yo, cuando hago el amor, lloro.
Hechizada me convierto en otros pies
en otras manos y otra lengua que
habla entre mis dientes
familiar y extranjera
recitando versos en la pequeña muerte
del sexo.


***


¿Papá mamá puedo sacar
lo que guardaban
y esparcirlo
que circule que ruede y que
otras manos
acaricien
su materia su forma
hasta volverlas nuevas?
¿Puedo mamá papá
regalar olores
expandirlos por el planeta
y más allá
de la atmósfera
que floten sin gravedad
como recuerdos sin cuerpo
como globos que se fueron?
¿Me permiten
llenar el universo entero
de sus tesoros
y que confundan a los astros
los aviones y platos voladores
los pájaros?
Quiero desparramar cubrir
cada molécula del mundo
con zapatos
ropas viejas
vestir al aire incendiar la noche
y dormir ahí
entre  el calor
y el brillo.



Un salmo dijo Os

y yo que pido
yo que siempre pido
escribo ahora
autorizada
y ruego
en voz alta
a quien escuche mi plegaria
a los ojos que alojen
la luz del mundo

un brillo

un reflejo donde vuelva
la belleza desprendida
de los días
en hojas de otoño
en gotas de rocío
iluminando

las risas de mi madre
los cantos de mi padre

¡tambores!
¡trompetas!
la marcha de la vida
que no cesa

Pido
salvarme del silencio
de olvidar las voces

y clemencia

a quien sea que tenga el poder
de impartirla
si las voces callan
si olvido.


Celina Feuerstein


Celina Feuerstein nació en Buenos Aires. Estudió psicología en la UBA, y trabaja como psicoanalista. Cuando le preguntan por la poesía, dice: “Desde que tengo recuerdos jugaba con las palabras, escribía poemas en cuadernos y libretitas. Ahí empezó el viaje, la travesía por el maravilloso mundo de la poesía”. Es en este viaje que conoce a Osvaldo Bossi. Asiste a su taller en forma individual y grupal. Participó en la Antología del Rayo Verde 2015 y prepara un libro: “El brillo de los días”, del que forman parte estos poemas inéditos.




No hay comentarios:

Publicar un comentario