sábado, 8 de octubre de 2016


qué locura qué párvula lengua


Medianoche

escribe el "poema" sentada en el bidet del baño de su casa a medianoche
lo llama poema se da el lujo el tupe qué arrogancia
la lima de uñas al lado del tecladito
los chicos no duermen
parece que nunca durmieran
escribe con las piernas abiertas
la bombachita rosa sobre sus muslos
y un chorrito de orina saliendo abrupto caliente sencillo
y lo llama poema
qué coraje qué valor mascarita vieja
cuando empezó a escribir ?
de grande nomás
cuando dejó de ser ama de casa
qué locura qué párvula lengua osa tocar el trono de los letrados
analfabeta escribe desde el bidet de su casa desde que marido abandona hogar
llama a esto poema, insubordinada
clama por los me gusta de sus adeptos seguidores
cuenta intimidades mientras se desprende silencioso un segundo chorrito de orín y su bombachita rosa cae ya sobre el mosaico frío del baño
mujer cuarentona escribe neófita
su poema no habla de rosas en los campos
ni de amaneceres en bosques
sencillamente porque en el bidet no crecen rosas
y sus hijos varones orinan fuera de la tabla
le dice poema la caradura a esto
blasfeman la lima de uñas el teclado el espejo
hasta el repasador sucio y grasoso que cuelga junto a la toalla de mano
graciosa cuenta sus avatares el desamor la olla sobre el fuego la cocina rota la persiana que cuelga
revela el don de su insania
dice que ya es hora
de subirse la bombachita rosa
que las mujeres poetas sensuales
se secarían con paño tibio sus entrepiernas
y ella cuarentona vieja impúdica solo solloza sobre el bidet y confunde orín con lágrima
y lo llama poema

Ceci Berro (inédito)





miércoles, 5 de octubre de 2016

VALERIA DE VITO

 Por qué el odio es un amor tan grande





*
Compré todo lo necesario para espiar
por las rendijas de las persianas.
El tiempo
vuelve y va como una mariposa
o un murciélago, golpeándose
la cabeza entre una y otra,
una
y otra rama
del árbol.
Espiar es un hecho finito,
Perderte no.

*
Recostados sobre la hierba
el pasto nos llena la boca de rocío;
el rocío es esencial,
lo
elemental
es el chicle,
pasarte el chicle con la boca
es
sentimental,
pero no quiero mentir.

Ahora
no
nos
pasamos el chicle
y esto
es un cliché
al que le temo.

Temo
caer
en los reclamos
que
ahora nos pasamos
como nos pasábamos el chicle
mientras
todo el rocío hacía
de vos:
           el pasto,
           el chicle,
           los clichés
           suavidad,
           amor,
           cantos,
           canciones sobre el pasto,
           mi canción elemental.

*
Llovía
cuando
estábamos juntos,
y juntos caminábamos
no sé adónde
o dónde
llovía,
no sé.

No sé
si escribo
para vos
o para mí;
por qué escribo
si sé
qué
me pasa.

Son muecas, gestos
partes de un todo
que se está yendo.

Lamento, lamento, lo lamento,
mientras un mosquito filoso
me pica el antebrazo
y paro de escribir para matarlo.

Quiero volver a verte
o empezar a verte,
a comprender
qué me pasa,
qué escribo,
para qué escribo.

¿Para nada
o para vos?

Quiero volver a verte
o renunciar
a verte,
a aceptar
qué pasa,
qué pasaba,
por qué el odio
es un amor tan grande
que se esparce por el cuerpo.


Valeria De Vito (1977)
De “Un ramillete de rocío” (El ojo del Mármol, 2016)

Publicó "Colección de fantasmas" (Editorial El Ojo del Mármol, 2014 / / reeditado por Ediciones 27 Pulqui en 2015)
Participó de las antologías "Veni Vidi Vici": 42 canciones de Madonna reinventadas en poesía, cuento y obra visual (2015) y  "Taco Aguja" (Cuentos de Terror, escritos por mujeres en Editorial Pelos de punta, 2015)
Dirige el Sello Editorial El Ojo del Mármol